Inicios del Hospital Zonal “Dr. Andrés Ísola”
Investigación realizada por el Centro de Estudios Históricos y Sociales (CEHyS) de Puerto Madryn.
Por María Beatriz Herrero y María Julia Paz

Como sabemos en 1865 llegó el primer grupo de galeses buscando nuevos horizontes y con ellos, las ideas de la revolución Industrial: los ferrocarriles y los motores a vapor, y la necesidad de un muelle. Tema ya planteado por Lewis Jones y Love Jones Parry un par de años antes, cuando arribaron con el fin de encontrar el mejor lugar para el histórico desembarco.
Para 1886 nuestra ciudad era un caserío con población estable que sólo fue posible gracias a la llegada del ferrocarril, que concretó la acumulación de agua que provenía del Río Chubut. Los primeros valientes eran los trabajadores solteros abocados a la construcción de las vías férreas y las autoridades marítimas que por aquel entonces ya se habían asentado a orillas de la Bahía Nueva.

Así se consolida de manera permanente y definitiva el nuevo pueblo. Lugar que no era desconocido y deshabitado. De hecho, las comunidades indígenas, los pueblos originarios de estas tierras, ya las habitaban, pero de manera nómade.
Pasados los años, el desarrollo de las producciones agrícola-ganaderas del valle hizo grande el avance del intercambio comercial, además del poblamiento y trabajo de inmigrantes en los campos aledaños al pueblo, la llegada de barcos con mercaderías importadas, el desarrollo de las rutas al interior del territorio y el creciente trabajo de los troperos llevando y trayendo diversidad de mercancías. Todo ello, junto a la política nacional de inmigraciones, hicieron que este pequeño punto a orillas del mar, fuera elegido por más soñadores y hacedores, consolidando su crecimiento y desarrollo.
Para inicios del 1900, aún Territorio Nacional, Chubut se encuentra muy alejado (en todo sentido) de los centros populosos del país, sin medios para enfrentar las contingencias de enfermedades, accidentes. No se contaba con un hospital o dependencia donde esos habitantes pobres, de bajos recursos, pudieran encontrar los medios para su curación. Según Esteban Williams, presidente del Honorable Concejo Municipal en la inauguración del edificio del Hospital en 1927: ¨Puerto Madryn era el punto de embarque de la mayor parte del territorio, en consecuencia, su pueblo era el que más sentía la necesidad de contar con un establecimiento hospitalario dotado de elementos indispensables para la atención de los enfermos que llegaban de todas partes del territorio. Muchas veces llegados de recorridos extensos (lo que ponía en riesgo la salud pública), debían alojarse en hoteles y hasta en restaurantes esperando un vapor, que a veces no llegaba con regularidad con un médico a bordo; y debían regresar a sus pagos sin lograr la intervención sanadora, denotando la falta de asistencia social¨.

Los primeros médicos que comenzaron a actuar en el pueblo, según nos cuenta Hugo Antonio Albaini, fueron el Doctor José Martinengo y el Doctor Gaspar Greach o Greca según figura en otras fuentes consultadas. Viajaban desde Trelew dos veces por semana.
Ellos fueron quienes asesoraron a los miembros del reciente gobierno municipal en la preparación de un proyecto para la habilitación de un hospital y los inicios de la negociación con la Compañía de Tierras de Madryn para la obtención de un terreno para ese fin.
Para 1910 comienza a atender también el Doctor Alberto Dionisio Ávila Castilla. En 1919 llega el Doctor Rafael Cosentino, médico cirujano, que atendía en su consultorio particular. Era también médico de la Subprefectura Marítima y del Ferrocarril Central del Chubut; y una vez por semana visitaba Puerto Pirámides.
Pancho Sanabra nos cuenta en sus libros que el médico era muy respetado en el pueblo. Atendía por la tarde en su consultorio y, por la mañana, visitaba los pacientes en su domicilio. Las parteras iban al domicilio también, sin importar la hora ni el estado del tiempo.
Durante 1923 y 1924 el presidente del Concejo Municipal, el señor Cupertino Tempestuoso Alt, solicita al Diputado Nacional Dr. Francisco Albarracín gestione ante la Cámara de Diputados una partida de dinero destinada a la construcción del Hospital.
El 1 de noviembre de 1925 se dicta el Decreto Nacional aprobando los planos y el presupuesto a instancias de Don Agustín Pujol, Presidente del Honorable Concejo Municipal. Es así que se obtienen un total de $95.833,33 con los cuales se construyó la mitad del pabellón de admisión (con una superficie cubierta de 810.08 metros).

En abril de 1926 el Concejo Municipal da poder al Dr. Albarracín para que en nombre del mismo acepte la donación de 2 manzanas de terreno cedido por la Compañía de Tierras Madryn. El 25 de Septiembre de ese año quedan finalizados los cimientos del Hospital.
El edificio dispone de una sala con capacidad para 12 camas, dos salas para enfermos aislados y una salita más pequeña para un aislado, una sala de operaciones, cocina y dos grupos de servicios sanitarios con baños y demás comodidades. Posee un sótano donde se coloca la caldera para la calefacción.
El 8 de Agosto de 1927 el Honorable Concejo Municipal se hace cargo del Hospital para cuidar su conservación y gestionar que la Comisión de Asilos y Hospitales Regionales se haga cargo de su sostenimiento. El 24 de ese mes se toma posesión municipal del edificio en presencia de autoridades nacionales y numerosos vecinos. El edificio fue entregado por el Ingeniero Arturo Rossy Malbert (segundo jefe de la zona sud de la Dirección General de Arquitectura de la Nación) al Presidente del Concejo el señor Esteban Williams.
El 1 de diciembre de 1931 se produce la apertura del Hospital como asistencia pública dependiente del Ministerio de Salud de la Nación. La atención está a cargo del Doctor González Gallastegui, médico radicado en Trelew, que viajaba dos días a la semana a nuestra ciudad.
En 1940 se hace cargo de la Dirección del Hospital el Doctor Buzzi hasta que es trasladado a la Capital Federal y en 1945 asume el Doctor Andrés Ísola hasta el año 1976, en que se jubila.
Para 1950 se llamaba Hospital Rural de Puerto Madryn. El prestigioso Doctor Carlos Pozzi era el médico asistente del Doctor Ísola, como administradora estaba la señora Frida Grimm, como obstétrica la señora Gumersinda de Barbi, auxiliar de administración el señor Justo Prado. También haciendo trabajo administrativo estaban María Luisa Diez y Aurora Sebrone. Técnicos Auxiliares eran Ibero Cores, Primitiva de Cores, Blanca Azcárate, Juana Andreu, María Delia Fanton, Tomasa Ponce, Matilde de Sempere, Mario Ponce, Elva de la Roza, Josefa Martínez y Elena de García. Actuaban como enfermeros Ibero Cores, Mario Ponce, Primitiva Cores, Blanca Azcárate, Magdalena Guinazú y Tomasa Ponce.
Los servicios generales estaban a cargo de Benedicto Cornejo, Ramón Ampuy y María Inés de Ampuy, El odontólogo era Américo Papetti. Había dos cocineras, la señora María I. de Ampuy y la señora de Lungo.
Cabe destacar que en aquellas épocas la polifuncionalidad y la fuerte pertenencia al lugar hacía que a falta de recursos económicos y técnicos estuvieran siempre dispuestos los recursos humanos, cada uno, por cuestiones de necesidad, podía cumplir más de un rol; a tal punto, que cuando fue necesario instalar la red de gas, la hicieron en sus ratos libres Ramón Ampuy y Benedicto Cornejo. Los aparatos de gas y la lámpara de operaciones se compraron con dinero de rifas que organizaba el personal.
Para 1953 Madryn contaba con tres médicos: los doctores Ísola, Pozzi y Kirchmayer. Luego se sumaría el Doctor Rasmusen.
En 1985 comienza la construcción del nuevo Hospital, que se inaugura oficialmente el 3 de octubre de 1997. En el año 2010 es ampliado.
En 1988 se le impone el nombre del Dr. Andrés Ísola en reconocimiento a su labor.
En 1998 el edificio del viejo Hospital es declarado como Inmueble de Interés Patrimonial (Ordenanza N° 2822-98).
En 1999 el Ministerio de Salud Provincial elabora el proyecto integral de recuperación y restauración de este edificio.
Sin embargo, el 10 de agosto del 2008 el edificio es destruido.
Suplemento Diario de Madryn
Archivo de la biblioteca pública municipal “Domingo Faustino Sarmiento” Quiere que le cuente Los caminos de la salud

