El equipo directivo del Hospital Ísola en particular y el personal de Salud en general, acompañan en este momento difícil a la familia, afectos cercanos y compañerxs de trabajo de Jorge Fernández, Técnico de Laboratorio de esta institución, quien falleció el día de ayer a sus 62 años.
A continuación, compartimos unas palabras que le dedicó una de sus compañeras en nombre de todo el equipo de Laboratorio:
“Te conocimos con el pelo largo, atado prolijamente con una colita, unos blancos bigotes tupidos y quemados por el pucho, eras todo un personaje! Hasta que un día apareciste en el trabajo con el pelo corto y afeitado, de repente había un pibe más en el grupo!, dijiste que era una promesa. Siempre puntual, siempre impecable, siempre con una sonrisa, siempre ubicado estratégicamente en la ronda de la mateada a la mañana antes de arrancar la jornada… Y si te robaban el mate y después te lo daban, siempre lo cedías… “no, no, dejá, tomatelo”, siempre de varios sorbos y de tomarlo todo, hasta que haga mucho ruido! Eras el único valiente que pasaba por cualquier box y preguntaba ¿”funciona”? Y sin esperar respuesta igual se cebaba esos horribles mates fríos y abandonados, fruncías el ceño y lo tomabas igual… El del yogurt a media mañana… Siempre preguntándole a las pacientes “¿cómo está esa panza? “, y cuántas veces alertando a los doctores que un bebé estaba en camino! Siempre amable, siempre correcto, siempre predispuesto para todo, siempre sonriendo, siempre en todas las selfies! El que se bailaba todo! De inicio a fin en cada juntada, y al que le gustaba ayudar a preparar los tragos! El que agitaba los brazos fuerte y daba largos pasos cuando estaba enojado, protestando por lo bajo con la orden en la mano… El que siempre estaba ahí para darle un consejo a quien lo necesitaba. Al que le gustaba enseñar y no tenía problemas en compartir con los demás sus conocimientos. Un excelente compañero, amigo e incansable trabajador. UN TIPAZO!
En el Servicio de Laboratorio quedará un vacío enorme, al igual que en todos los lugares donde tuvieron la oportunidad de trabajar con vos y conocerte. Cuánta tristeza! Te vamos a extrañar mucho, mucho! Un abrazo inmenso a tu esposa e hijos.
Hasta siempre Jorgito!”